Nuevamente la U dejó escapar puntos que pueden ser valiosos para el último objetivo que queda: la liguilla para Copa Libertadores. Los azules nuevamente jugaron un partido peor que mediocre aunque esta vez no bastó con eso para quedarse con el triunfo. Los dardos apuntan al esquema del técnico Marco Antonio Figueroa quien, además, se dio el lujo de defenderse cuando los penquistas estaban con 9 hombres (la U con 10) y de improvisar cambios que poco y nada ayudaron.
La U entraba a la cancha del Santa Laura con las dudas dejadas la semana pasada en el triunfo frente a Huachipato y con una serie de modificaciones, al menos eso se decía, realizadas por su técnico. Las principales novedades: Rubio a la banca y Fernández no fue citado.
Y el partido no comenzó mal. Los azules intentaban atacar y se veía que el duelo no sería difícil. Sin embargo con el correr de los minutos los jugadores de Universidad de Concepción poco a poco se fueron encontrando y cada vez llegaban con más peligro al pórtico defendido por Marín.
La U demostraba lo suyo también. Un remate en el travesaño de González y un gol desperdiciado en la boca del arco por Ubilla fueron el mayor peligro azul. Pero en el duelo de ida y vuelta que se tornaba el primer tiempo, Lorenzetti se encargó de abrir la cuenta. Corría el minuto 28 y, tras habilitación de José Rojas y taco de Díaz, el “Duende” remató de media distancia y batió al portero Muñoz. 1-0 y la U aseguraba su lugar en la liguilla. A los 38 se fueron expulsados Osvaldo González y Diego Díaz. La primera parte terminó así.
Pero el pitazo inicial del segundo tiempo fue el comienzo de la pesadilla. Los penquistas se fueron en busca del empate y la U comenzó a arroparse, tratando de mantener el mezquino resultado. Los de Concepción cada vez ingresaban con más peligro a territorio azul y los dirigidos por Figueroa mostraban las mismas falencias de la semana pasada: imprecisiones, nerviosismo, cansancio, desorganización.
Las cosas se arreglaron un poco cuando el juez (de irregular cometido) expulsó a Felipe Muñoz en el minuto 80. La Universidad de Concepción se quedaba con 9 jugadores y al partido le quedaban escasos 10 minutos.
Pero no, todavía no estaba cerrado el partido. Corría el minuto 83 cuando Berríos sacó un remate bajo desde fuera del área y decretó el empate 1 -1.
Los azules sintieron el golpe y se fueron (recién) con todo arriba. El desequilibrio pudo llegar con un remate de Farfán que se estrelló en el horizontal y la posterior chilena del paraguayo Rojas que detuvo Muñoz, pero nada de eso y el duelo terminó empatado.
La U aun no asegura un cupo en la liguilla, al menos matemáticamente, pero lo malo no es eso, lo malo es pensar que con lo mostrado últimamente, será, objetivamente, bueno meterse en la liguilla o lo mejor será comenzar a pensar en el próximo torneo y reestructurar este equipo que no ha funcionado. Sea la respuesta que sea, a mí juicio deberíamos estar viendo los últimos partidos de Figueroa al mando de la U quien prometió irse si no ganaba títulos y si he visto bien no los ganó ni tampoco ha mostrado un buen rendimiento en la cancha.