El delantero de San Lorenzo es el segundo goleador del campeonato argentino y aparece como el gran refuerzo azul para el segundo semestre. La primera opción de Jorge Sampaoli para reforzar la delantera de Universidad de Chile era Pablo Zeballos, pero el delantero de Olimpia era muy caro para las pretensiones azules.
Sin embargo, el DT tenía una segunda opción y es Emmanuel Gigliotti, jugador de San Lorenzo que el fin de semana apareció en todas la portadas al anotar dos goles para los «cuervos» que le sirvieron para dar vuelta el partido ante Newell’s y salir de la zona de descenso directo.
Difícil parece creer que el nuevo ídolo del «ciclón» hace poco más de dos meses estaba relegado a la banca de San Lorenzo con Leonardo Madelón y que tras la llegada de Caruso Lombardi, que en su momento también lo pidió para Argentinos Juniors, resurgió, ya que tras 17 partidos sin marcar anotó el pasado 10 de abril el 1-1 ante Racing.
Tras ello, el «Animal», como es apodado, lleva siete anotaciones (promedio de 0.58 por partido), seis de ellas de cabeza, y es el segundo goleador del campeonato transandino.
La historia en el fúbol no ha sido fácil para Gigliotti, ya que como el mismo ha reconocido sólo jugaba para hacer felliz a su padre y pasar el tiempo.
De hecho, en una entrevista concedida a Olé, indicó que «soy un burro con suerte adentro del área».
Pasó por diversos equipos en las inferiores, hasta que a los 16 años, en Lamadrid, se jugó su última oportunidad.
Un día, le dijo a su técnico que quería dejar de jugar de central para hacerlo de delantero, y anotó un par de goles en una práctica ante la primera.
Llegó luego a Argentinos, pero Caruso se fue a los pocos días, y tras ello pasó a All Boys, donde anotó 16 tantos en el Nacional B.
Volvió a primera en 2009 con Tucumán y el 2010 pasó al Novara en Italia, donde tras su estadía incluso debió pasar por el psicólogo para recuperarse anímicamente.
«Estaba todo el tiempo comiendo pastas y pescado. Tenía una panza enorme», reconoció al mismo medio transandino.
De ahí se reencontró con el fútbol nuevamente en All Boys y llegó a San Lorenzo en el segundo semestre, donde incluso llegó a jugar por la selección en septiembre del año pasado.
Ahora vive un momento de gloria y está con contrato vigente con San Lorenzo, pero este tiene una cláusula de salida a mitad de año por un valor que superaría los US$ 1.5 millones.
Fuente: La Tercera