Pese a que la «U» manifestó ayer en voz del presidente de Azul Azul, Michael Clark, que no querían que este partido se reanudase y que la llave tendría que quedar en manos azules, el directorio de la Federación del Fútbol de Chile dictaminó otra cosa.
Dentro de este había dos posiciones, desde la ANFP en voz de Pablo Milad quisieron ajustarse al reglamento y disputar el encuentro, mientras que desde ANFA apostaban por la expulsión de la Copa Chile.
Finalmente, la decisión se ajustó al reglamente y no se aplicó una medida extraordinaria. De esta forma los restates 85 minutos de partido se deberán jugar en estadio a determinar, fecha a determinar y sin público.
Una información que no ha gustado en la «U», donde su Gerente Deportivo señaló que al club no se le ha entregado ninguna información sobre la resolución.