El uruguayo soltó toda su alegría tras conquistar la corona nacional con la U.
Con un gol muy similar al que le marcó a Unión Española en la fase regular, el uruguayo Juan Manuel Olivera le puso su firma al título de Universidad de Chile en el Torneo de Apertura, tras lo cual dio rienda suelta a su alegría, en diálogo con Al Aire Libre en Cooperativa.
"Es una sensación inexplicable, una felicidad inmensa, no por mí, por haber hecho el gol, sino porque creo que este equipo se lo merecía, sobre todo por lo que mostró hoy. Creo que mostró las ganas que tenía de ser campeón y necesitábamos ese gol, lo hiciera quien lo hiciera. Me tocó la suerte a mí de poder convertirlo, pero creo que es un poquito de cada uno", expresó.
Olivera no quiso calificar este logro como una revancha por la final perdida en 2005, cuando también integraba el plantel azul.
"No, porque para que sea un revancha se tienen que dar las mismas circunstancias. Creo que es una segunda oportunidad que me brindó la vida de poder jugar una final acá en Chile y sacarme la espina de ser campeón", sostuvo.
Consultado por si pensó en ser campeón en su primer torneo tras regresar a la U, dijo que "de repente no te lo esperás, uno las ilusiones las tiene, pero me encontré con un grupo bárbaro, un grupo humano extraordinario, con una calidad de jugadores excepcional que dio la posibilidad de pelear la final y ser campeón".
El delantero "charrúa" no se olvidó que en algún momento fue resistido por la hinchada y recibió muchas críticas. "De repente uno por momentos no era del gusto de la gente, tampoco del periodismo, pero bueno siempre estuve tranquilo gracias a Dios y en los malos momentos me apoyó la familia, en los buenos también, así que estoy agradecido de ellos", expresó.
Y así dedicó el título el uruguayo Olivera: "A mi señora y a mi hijo, y a la gente Uruguay que me bancó a morir cuando uno no la pasaba tan bien".
El uruguayo Olivera celebrando con sus compañeros, su medalla y el trofeo de campeón.