El volante tendrá que ser operado de su hombro derecho.
Entre dos a tres meses estará fuera de las canchas el volante Walter Montillo, quien el jueves sufrió en el duelo amistoso ante Audax Italiano una disyunción acromio-clavicular en los ligamentos del hombro derecho, en su grado mayor, por lo que deberá ser operado en los próximos días, según lo confirmó el doctor Alejandro Orizola.
"Walter tiene una disyunción acromio clavicular, que es una ruptura de lo que une la clavícula con el resto del hombro. Esto tiene grados variables de complejidad y el jugador tiene el grado mayor, tiene todo roto. Tendrá que ser operado en los próximos días y va a significar que tendrá que estar fuera de las canchas entre dos a tres meses aproximadamente, que es lo que se demora la recuperación para volver a hacer deportes", señaló el galeno.
Montillo asumió con amargura este momento, indicando que la mala suerte ha sido una constante en su estadía en el elenco universitario, donde el año pasado ya sufrió una importante lesión muscular.
"Da bronca por la manera en que fue, especialmente por el tiempo que estaré fuera. Pero así es esto y sólo tengo que esperar que pase el tiempo. Hay que tener la cabeza fría, estar con la familia, y esperar tener una buena rehabilitación", expresó el jugador.
"Estaba con muchas ganas de jugar la Copa Libertadores y me toca lesionarme en un partido amistoso que no tiene mucha trascendencia me lo tendré que perder. Espero estar si Dios quiere en la fase grupal", declaró.
Asume que no hubo intención de Yáñez
El volante trasandino recordó la jugada en la que sufrió la severa dolencia, argumentando que su choque con Renzo Yáñez fue absolutamente sin intención de parte del jugador de Audax Italiano.
"Traté de saltarlo y cuando él me pega a la altura de la rodilla no alcancé a colocar los brazos como para apoyarme y caí con todo el hombro. De inmediato me di cuenta que era algo grave ya que no podía mover el brazo. Fue lo peor que me pudo haber pasado, pero tengo que levantar la cabeza, no queda otra", recordó.
"Fue una patada normal. Yo me enojé porque el juez no dejaba entrar al cuerpo médico y pensaba que estaba simulando. Pero hay que seguir trabajando y buscar apoyo en los familiares y amigos par salir de este momento", argumentó.