Luego del término del torneo 2022, la directiva de Azul Azul ha puesto todas sus prioridades en la búsqueda de un entrenador que se pudiese sentar en la banca en la siguiente temporada y que sea parte de la conformación del plantel.
La primera tentativa que tenía la dirigencia incluía nombres como el de Francisco Meneghini, quien continuará en Everton, y el de Sebastián Beccacece, quien en su futuro próximo no tiene la idea de volver a Chile.
En aquella lista también aparecía el nombre de Martín Lasarte, quien rápidamente se esfumó de la candidatura al no tener un cuerpo técnico conformado y también al avisar que no dirigiría hasta despues del mundial.
Con esto los ojos de Azul Azul se posaron en primera instancia en Mariano Soso, quien terminó su vínculo con O’Higgins y hoy es el nombre más avanzado para ser el técnico de la «U», pero que no cuenta con el convencimiento de todo el directorio.
En la búsqueda de ampliar el abanico, aparece el nombre de Nicolás Larcamón, quien viene de dirigir al Puebla de México. Su salida anticipada, según informa La Tercera, significó la firma de una cláusula que le impide tomar un equipo por el 2023. A eso también se le suma que sus pretenciones siguen estando en norteamérica.
Otro nombre que surgió fue el de Diego Martínez según informó radio ADN. El técnico argentino terminó su contrato con Tigre y aparecía como una buena opción. Y pese que también era pretendido por Boca Juniors, desde el otro lado de la cordillera afirman que ya tiene todo acordado para continuar en la banca del cuadro azul y rojo.
En las últimas horas ha vuelto a surgir la opción de Miguel Ángel Russo. El técnico era opción para Nacional de Montevideo y ahora aparece en la órbita de la «U». El viejo anhelo de que pueda volver a sentarse en la banca azul de momento es mantiene en eso, un anhelo.