El pasado domingo en el Estadio Monumental debía jugarse la semifinal del fútbol femenino entre azules y albas, pero un cobarde ataque a la familia bullanguera hizo que el partido se trasladase a el complejo de Quilín y recién ayer pudiera disputarse.
El partido tuvo dos tiempos muy distintos, en el primero las azules fueron sobrepasadas por el poder ofensivo del archirrival. Fue así como a los 21 minutos las albas abrieron el marcador mediante la paraguaya Gloria Villamayor y tuvieron la oportunidad de aumentar si no es por la brillante actuación de la portera Fernanda Cárdenas.
En el segundo tiempo el equipo dirigido por Andrés Aguayo entró con otra actitud a la cancha. Fue así como a los 63 minutos Ámbar Soruco capturó una pelota en el área que sería el empate parcial para las chunchitas.
A los 82 minutos tras una falta en el área sobre la figura argentina Mariana Larroquette, la «Fer», portera azul encargada de lanzar desde los doce pasos, puso la ventaja definitiva.
Pero el partido estaba hecho para sufrir, fue así como los restantes minutos las rivales tuvieron un palo y una pelota que sacó de la línea la defensa Macarena Ávila.
De esta manera la U se instaló en la final, donde deberá enfrentar a Palestino, actuales monarcas del torneo femenino y se suman a las chunchitas sub 17 que en la final de su categoría lucharan por el título frente a Deportes Temuco.