Un centenar de hinchas azules se reunieron en el frontis del Centro Deportivo Azul para dar a conocer su rechazo a la implementación del Plan Estadio Seguro y otras medidas de restricción a las hinchadas chilenas. También entregaron todo el apoyo al equipo que atraviesa por un mal momento.
A las 10:30 hrs. se dieron cita cientos de hinchas azules bajo la consigna “Queremos el bombo y todo de vuelta”, a la reunión convocada por Los de Abajo, llegaron hinchas de todas partes y mediante cánticos mostraron todo su rechazo a las políticas implementadas desde la aplicación de Estadio Seguro.
Los hinchas también protestaron contra la concesionaria que maneja el Club ( Azul Azul ), ya que según ellos, el modelo actual de la institución no permite la participación de socios e hinchas y se critica que el destino del equipo sea resuelto por un grupo de accionistas.
Esta actividad se da en el marco de la mala campaña que vive el equipo y del creciente uso de bengalas e ingreso de un bombo por parte de la hinchada de Universidad de Chile, todo ha significado la crítica de medios de comunicación, la concesionaria, jugadores y la opinión pública en general. Sin embargo quienes se encuentran tras estas manifestaciones han recalcado que no se pretende dañar al equipo y que, como dicen en sus redes sociales “no tiene que ver con la mala campaña del equipo, buscan y buscan las razones de la revuelta y tratan de construir la idea de una «crisis» en torno a los pocos puntos y los muchos goles en contra, la verdad es que están lejos”, declaran.
Es más, apuntan a dos aspectos que, según la visión de Los de Abajo, son los responsables de la crisis del equipo y del fútbol en general, “la única crisis acá es la existencia misma de las Sociedades Anónimas del Futbol que transformaron al hincha en cliente, particularmente acá, donde instalaron una dictadura económica que no le dejó ningún centímetro de participación a la hinchada, solo a los accionistas”, añaden.
En el futuro se avisoran más manifestaciones, ya sea al interior del estadio como fuera de éste, “los golpes se responden con FIESTA, dejando en ridículo todas sus ineficientes medidas de seguridad, demostrando partido a partido que no pudieron, que no pueden y que no podrán”, concluyen.