Era el partido más atractivo de la fecha. Azules y loínos se enfrentaban para escalar en la tabla de posiciones y para romper una paridad única entre ambos equipos. Un empate con gusto a poco para los del León y con sabor a triunfo para los nortinos.
Universidad de Chile enfrentaba a Cobreloa en el estadio nacional. Azules y loínos se enfrentaban contando 30 triunfos para cada uno y 27 empates en los duelos entre sí. Ambos intentaban subir posiciones en la tabla del torneo, más aún tras la caída de O’Higgins a manos de Everton en la quinta región.
Pero nada de eso. En un partido que la U dominó casi de principio a fin, creando las mejores jugadas de peligro, los loínos se pusieron en ventaja injustamente y cambiaron todo el panorama del pleito.
En un primer tiempo donde no hubo goles pero sí llegadas claras, sobre todo y en un 90% por parte de la U, se pudo observar ya como sería la tónica del partido. Remates de distancia, jugadas elaboradas y un sinfín de ideas tenían los azules para concretar pero la gran actuación de Palos, portero rival, y la impericia al momento de definir, conspiraron para que el primer lapso se fuera con un magro 0-0.
El segundo tiempo fue mucho mejor, claro, llegaron los goles pero no bastaron. La U seguía dominando, con clara mayor posesión del balón y con gran toque, sin embargo el peligro se quedaba en eso, peligro.
Lamentablemente, cuando el partido terminaba, una desinteligencia defensiva y la fortuna del delantero naranja Sebastián Pol hicieron que, tras remate de distancia, los del norte se pusieran en ventaja. Lamentable porque la U dominó y porque hace unos minutos el árbitro había cobrado un penal a favor de los azules por falta de Palos a Ubilla que fue desestimado por el juez de línea.
La U no se quedó en eso y comenzó a buscar con más ímpetu aún el empate y éste no tardó en llegar. Pase de Cortés y Ubilla recibe de espaldas al arco, gira, se saca el defensor de encima y saca un remate furioso para decretar el empate 1-1 definitivo.
Insisto, la U dominó, fue mucho mejor que el rival, pero la falta de gol sigue penando en los azules. Un partido que pudo haberse asegurado muy temprano termina complicándose y sacando solamente un punto para seguir en carrera.
No se pueden seguir perdiendo puntos. El equipo jugó bien, es cierto, pero la falta de un finiquitador de área hace que este empate, como muchos otros, sean dos puntos perdidos y no un punto ganado. A esperar el jueves, donde la U vuelve a saltar a la cancha, esta vez por Copa Libertadores de América, para ver si se sigue dando la lucha por estar en segunda ronda. Que así sea, por el bien de Franco, del plantel y de todos los hinchas azules.