El soliloquio Azul finalizó con un 5-0 histórico, situación que inscribe, de nuevo, al equipo de Jorge Sampaoli en la historia grande del León. Escrito por: Claudio Cortés
Un baile de principio a fin. De esta forma podemos resumir lo que ocurrió esta tarde en el Estadio Nacional. Se supone que había dos equipos en la cancha, pero el dueño de casa se hizo de la fiesta.
Desde un comienzo la U dejó claro que quería saldar una cuenta pendiente que no había podido saldar. Antes del minuto de juego Charles Aránguiz mostraba un primer intento de gol, con una arremetida por la banda izquierda y a los 8’ Matías Rodríguez llegó con un cabezazo que hizo levantar de sus butacas a la hinchada azul. Fue una premonición de lo que sería el partido entero.
El nuevo Ballet Azul mostraba la misma semblanza que lo hizo coronarse campeón de la Sudamericana 2011. El elenco de Sampaoli controlaba con gran tranquilidad el encuentro, mientras los de Macul parecían no haber salido aún del hotel de concentración.
La doble línea de cuatro que dispuso Luis Pérez controlaba con dificultad los embates de la U, pero le faltaba fútbol. Rodrigo Millar, el encargado de armar juego para los Albos, no daba el ancho. Así, sólo, Esteban Paredes intentaba generar un poco de fútbol pero le era imposible, ya que no encontraba compañía.
Fue a los 43’ que la pizarra de Pérez cayó al piso y cual espejo se destruyó. Mauro Olivi fue expulsado y como si eso fuera poco a los 45’ Marcelo “Cara de Pato” Díaz con un tiro libre con de borde externo desde la derecha, doblego la débil resistencia de Francisco Prieto y marcó el primer tanto del partido.
Se pensaba que Colo-Colo con uno menos buscaría la paridad elevando su nivel de juego. Pero no fue así, Matías Rodríguez a los 47’ puso el marcador 2-0 tras un centro del “Xavi de la U”, adelantándose a Francisco Prieto el cual volvía a sacar la pelota desde el fondo de la red.
Debutar en un clásico es difícil, pero en un superclásico lo es más. Esto al parecer no le afectó en nada a Igor Lichnovsky quien a los 69’ con un certero cabezazo puso el marcador 3-0.
Al igual que el Polaco, Angelo Henríquez debutaba en un derby. Sin embargo a éste hace rato que no le pesa la camiseta y menos ser el heredero de Diego “Goku” Rivarola. Gohan, como buen descendiente de Cacaroto, con un golazo de bolea, terminó una vistosa jugada colectiva del Cuadro Mágico. Luego vino uno de los momentos más emocionantes del clásico. El nobel goleador al celebrar su anotación, y el cuarto de los azules, levantó su camiseta y mostró la famosa polera ploma de Zayayin. Inolvidable.
A estas alturas ya la fiesta era completamente Azul y se pensaba que las emociones se terminaban por el día. Nada. El minuto 92 fue un minuto histórico, Matías Rodriguez ponía el 5-0 y de paso inscribía nuevamente al equipo dirigido por Jorge Sampaoli en la historia grande de la Universidad de Chile.
En el teatro se dice que el monólogo es una forma dramática en la que una persona reflexiona en voz alta haciendo ver sus pensamientos, ideas y emociones al público. En este superclásico la U mostró al público todo esto y mucho más.