Es el goleador del equipo. En los inicios del Torneo de Apertura, asomó como figura descollante de la U. Pero a medida que avanzó el certamen y la Copa Libertadores, el limeño Raúl Ruidíaz se fue quedando paulatinamente en la banca por más minutos (sólo fue titular en un partido de la U en el campeonato local). Su capacidad de concreción en los últimos minutos no es puesta en duda en el seno del cuerpo técnico. Pero no existe total convencimiento a la hora de evaluar la sincronización con sus compañeros y su adaptación a las funciones que pide el entrenador.
Ruidíaz llegó a préstamo por seis meses a La Cisterna a cambio de 100 mil dólares. Está en la mira de clubes portugueses, pero Universidad de Chile debe informar a más tardar el 31 de mayo su intención. Tiene dos opciones: comprar la mitad de la carta del incaico en 600 mil dólares o el total en un millón y medio de billetes norteamericanos.
Sampaoli le habría comentado a la dirigencia azul que recién en la segunda mitad del año podría tener «a punto» a Ruidíaz, y que si la idea es hacer una inversión, no se negará, pero si el delantero o sus allegados aspiran a un desembolso exagerado en el sueldo o en los derechos del delantero, el técnico casildense pidió que no se esfuercen demasiado: si fuera por él, preferiría que los recursos se invirtieran en otra alternativa, como los delanteros extranjeros que sigue en el fútbol argentino y mexicano (ver nota central).
De todos modos, Ruidíaz tendría avanzadas conversaciones con Benfica para partir a Europa.
Fuente: El Mercurio