Mostrando el fútbol y la contundencia habituales el equipo de Jorge Sampaoli -ovacionado durante el partido- la U derrotó por 2 a 0 a Vasco da gama y se metió en la definición por el título del certamen sudamericano. Vargas quedó como goleador del torneo tras anotar el segundo tanto de la noche y disputará el cetro del máximo artillero frente a Barcos, ariete de LDU. Por donde se le mire, una jornada redonda.
Los nervios en una jornada de esta índole eran inevitables. Vasco no se veía como un equipo sencillo y venía con todas sus figuras, a pesar de estar peleando el Brasileirao; esto último, sin duda no era excusa para los cruzmaltinos. Había que pelear todo, nada se quedaba en las ganas y la U debía sacar con uñas y dientes el resultado adelante si es que querían llegar a la final, instancia en donde ya estaba instalado LDU.
El partido comenzó con los equipos parejos, intentando buscar su opción. Nada quedaba al azar y de forma tensa Vasco buscaba mediante juego aéreo, sin embargo no hubo nada más que nervios en el área y todo quedó en el cero. Lo mismo ocurría en el área brasileña, en donde vargas provocaba peligro pero no podía concretar y aumentaba la tensión en las galerías del Santa Laura.
Los cánticos de la hinchada aleonaban a la escuadra de Sampaoli, que poco a poco se acercaba al arco contrario, hasta que en el minuto 31 Gustavo Canales tomó un rebote y llenó de gol las gargantas bullangueras que repletaban el coliseo de Unión Española. El ariete celebró como nunca, dándose cuenta que una vez más apareció en un momento trabado, importante para la historia del club.
De ahí en más, las cosas serían azules; profundamente azules. Los de Sampaoli ganaban todos los balones divididos, salían jugando, llegaban al arco y creaban a piacere. El segundo tiempo tuvo un par de ocasiones de Vasco que encontraron la firme respuesta del portero Herrera, pieza fundamental en tan sólida campaña.
La alegría quería llegar de los pies de Vargas, que no pudo concretar un globito en el que la pelota salió caprichosamente rozando uno de los palos. Sin embargo, la noche era para que la gran figura azul tuviera su cuota de felicidad: con tortícolis incluida recibió un centro implacable y marcó sin problemas. Era el 2 a 0 y el resto estuvo de más.
Ahora vienen los duelos más importantes en la historia de Universidad de Chile, frente a uno de los más grandes de Sudamérica: Liga Universitaria de Quito, quien viene de golear a Vélez en el global de forma inapelable. Dos partidos durísimos, pero que sin duda tendrán a toda una familia azul detrás, poniendo las mejores vibras en el aire para lograr tocar el cielo.