Rincón del Bulla estuvo en el Estadio Nacional para cubrir un nuevo partido de Universidad de Chile, esta vez válido por la quinta fecha del Torneo de Clausura. Por problemas sociales el público fue escaso aunque no menos ruidoso. Los Leones no defraudaron y recuperaron la punta del Campeonato. Se mantiene la racha y se sigue soñando.
Se dominó pero costó concretar: el partido comenzó como todos los de la U en la era Sampaoli, con los azules volcados al ataque sin dar espacios a los rivales para acercarse al pórtico azul. De hecho recién en las medianías del primer lapso apareció Herrera que, hasta esa altura, era un mero espectador. Sin embargo el gol no llegaba por más que se buscaba. A los 21’ y tras un tiro de libre de Aránguiz y un pivoteo de Marcos González, Gabriel Vargas empujó el balón en la línea del arco y abrió la cuenta y el camino al triunfo.
A media maquina: no es extraño que una U jugando a media maquina sea capaz de pasar por encima de sus rivales en Chile. Así se vio hoy. A ratos un tanto displicentes los azules dominaron sin problemas a Santiago Morning que jamás representó un real peligro para las aspiraciones azules. Todas las llegadas de peligro correspondieron a la U y sólo un remate de tiro libre por parte de Riffo cerca del final del partido, obligó a Herrera a estirarse y sacar el balón. Afinando un poco más las piezas no debería haber problema en ningún partido.
El factor mediocampo: la partida de Seymur a Italia generó serias dudas en la hinchada azul. Quién sería capaz de llenar esa plaza vacía, era la pregunta. Aránguiz, un tanto “consolidado”, cubría pero faltaba el acompañante y Marcelo Díaz era la solución. Los últimos duelos disputados por la U el mediocampo defensivo ha sido una pieza fundamental en el esquema de los azules. Tanto así que no solamente son jugadores que recuperan balones sino que generan fútbol y hoy no fue la excepción.
Defensa impecable: la defensa ya es una marca registrada en la U y cada vez se hace más impasable. Marcos y Osvaldo González ya se complementan a la perfección y acompañados por el excelente juego del capitán José Rojas dan el equilibrio perfecto a un equipo ultra ofensivo. Hoy no tuvieron grandes problemas pero cuando fueron requeridos respondieron con elegancia. A pesar de no ser un excelente partido de la U la línea defensiva sigue aceitándose y funciona cada vez mejor.
Rivarola no falla: cuando nacían algo de dudas en el resultado y el 0-1 se hacía poco Sampaoli decidió enviar al campo de juego a Rivarola. Faltaban 8 minutos para el final del partido y más allá de verlo en cancha pocas eran las opciones de verlo hacer algo más. Pero “Gokú” no nos defrauda y cuando llevaba 40 segundos en cancha recibió un magistral pase de Gallegos y con un toque sutil a tres dedos y de emboquillada batió a Bravo. Golazo, el 0-2 de la tranquilidad y el 99 de Rivarola que sigue escribiendo su leyenda con la gloriosa camiseta azul.