Invictos y punteros absolutos. Esas son las dos palabras que definen el actual momento de Universidad de Chile en el Torneo de Clausura 2011. Ayer los dirigidos de Jorge Sampaoli derrotaron en un discreto partido 1×0 a Unión Española, en el Estadio Santa Laura. Con este resultado se instalaron como únicos punteros con 9 unidades a falta del partido pendiente ante Ñublense. A continuación, la tradicional Marca Personal en el Rincón del Bulla.
Johnny Herrera: Por el ambiente que le ha rodeado en los últimos días, aún así jugó concentrado y mantuvo su arco en cero , esta semana fue escogido por el Staff del Rincón del Bulla como la figura del partido. Muy bien. Salvó su arco a los ’21, ’34 y ’68 de una inminente caída con espectaculares atajadas, aunque estuvo bajo en el juego con los pies. Un 6,0.
Osvaldo González: entró a la cancha con la máscara protectora que lució contra Fénix, pero a los ‘5 se la quitó y jugó el resto del partido sin ella. Con esta acción demostró que es un guerrero y no le importó que algún roce o pelotazo en su rostro agravara su lesión en la nariz. En lo netamente futbolístico, se le vio muy bien, llegando a tiempo a las coberturas, sobre todo cuando Matías Rodríguez se iba en demanda del arco contrario. Todo un ejemplo, un 6,5.
Marcos González: es el patrón de la defensa azul. Por arriba es simplemente impasable y maneja bien los tiempos en las coberturas. Al parecer Sampaoli encontró en él y en Osvaldo González la pareja de centrales que tanto buscó en el primer semestre, y prueba de ello es que en los últimos siete partidos la ‘U’ ha recibido sólo tres goles en contra. Un 6,0.
José Rojas: ayer se le vio muy activo, sobre todo yendo al ataque y desbordando por izquierda. En la marca estuvo correcto y perdió muy pocos mano a mano. Un 5,5
Matías Rodríguez: bien por la derecha, tanto en la recuperación como en labores ofensivas. Junto a Eduardo Vargas, fue un constante dolor de cabeza para Mena, sobre todo en la segunda mitad. Un 5,5.
Charles Aránguiz: el ‘amigo de todos’ se vio algo desordenado en la primera mitad, pero en la segunda fracción estuvo más compenetrado con el juego del equipo y con el nivel que le estamos acostumbrados a ver y que le valió una nominación a la Selección Nacional. Tuvo la apertura de la cuenta a los ’46, tras una especie de centro que casi se coló en el arco de Wirth, pero que el meta rojo alcanzó a despejar en último momento. Participó en la jugada del gol de Universidad de Chile. Un 6,0.
Marcelo Díaz: la falta de juego que tuvo en la vuelta contra Fénix ayer quedó en el pasado. Estuvo muy participativo en el medio terreno, tanto en la marca como en las labores de creación. Su juego suplió el bajo rendimiento que tuvo Marino, sobre todo en la primera mitad. Un 5,5.
Guillermo Marino: tuvo una pobre primera mitad, perdió muchos balones y generó pocas ocasiones de riesgo. Casi anota un autogol a los ’38, tras un corner de Unión Española. Tuvo la apertura de la cuenta a los ’47, pero elevó. A los ’58 piboteó de cabeza para que Francisco Castro convirtiera la apertura de la cuenta. Lo reemplazó Gabriel Vargas a los ‘73. Un 5,5.
Eduardo Vargas: sigue siendo una de las cartas más desequilibrantes del ataque azul. Tuvo la apertura de la cuenta tras un corner servido por Marcelo Díaz, pero elevó el remate y a los ’81 malogró otra oportunidad al rematar muy suave a las manos de Wirth. Fue reemplazado por Magalhaes a los ’88. Un 5,5.
Diego Rivarola: tuvo una mala tarde. No supo combinar con sus compañeros en ataque y también le costó cuando bajó a colaborar en la zona de los volantes. Fue reemplazado por Gustavo Lorenzetti a los ’56. Un 5,0.
Francisco Castro: si bien aún le falta mayor control en su juego para explotar todo el potencial que tiene, ayer fue el que más buscó el arco de Wirth. En la primera mitad disparó dos desde fuera del área y a los ‘45+2 casi abre el marcador. En la segunda mitad siguió buscando por la izquierda y a los ’58 vio recompensado su hambre de gol al vencer al meta hispano, tras un piboteo de Marino que había recibido de Aránguiz por la derecha. Un 6,0
SUSTITUCIONES
Gustavo Lorenzetti: ingresó por Diego Rivarola a los ’56 y su presencia en el campo le entregó mayor dinamismo al alicaído juego que mostraba hasta ese momento el conjunto azul. Bien, un 5,5.
Gabriel Vargas: reemplazó a Marino a los ’73. Se le vio con muchas ganas e ímpetu. Tuvo mejor movilidad que Rivarola en el ataque y casi convierte a los ’87 tras una jugada que armaron Eduardo Vargas y Lorenzetti, pero desvió. Un 5,5.
Paulo Magalhaes: entró a los ’88 por Eduardo vargas. Como jugó menos de cinco minitos no tiene calificación.