El delantero uruguayo de Universidad de Chile, Carlos Bueno, fue muy autocrítico con el nivel de la ‘U’ y expresó que las diferencias en el plantel existen, pero que se deben olvidar en la cancha. Mientras Federico Valdés ratificó en su cargo a Gerardo Pelusso.
La derrota de Universidad de Chile sobre Ñublense agudizó los conflictos internos de los azules, que ya no desconocen la ruptura al interior del plantel, pero que esperan queden el olvido de cara a la liguilla por la Copa Libertadores.
El uruguayo Carlos Bueno sostuvo que "hay que meterse 100% en lo que será la liguilla, aferrarse a eso. Si no ganamos la liguilla nos tenemos que ir todos. Acá no somos todos amigos, pero en la cancha se tiene que olvidar si te habla o no con tus compañeros. Lamentablemente esta semana se repitió lo de las filtraciones a la prensa".
Por su parte, el timonel de los universitarios, Federico Valdés, le quitó responsabilidad a Gerardo Pelusso y lo ratificó en el cargo hasta el final de temporada, además manifestó que la dirigencia no puede intervenir en los problemas de sus jugadores.
"El técnico tiene bien poco que ver con lo que pasó en la cancha. Hoy perdimos porque jugamos pésimo. Ahora no es tiempo para hablar de la continuidad o no de Gerardo Pelusso, por eso él se queda hasta el fin de la liguilla", dijo el timonel.
Federico Valdés finalizó diciendo que "evidentemente hay algo que no está funcionando bien, pero la autocrítica se supone que queda dentro del plantel. Pero hay algunos jugadores con agenda propia y filtran las cosas a los periodistas, rompiendo el compromiso como grupo humano. No hay esa cohesión dentro del plantel para conversar ciertas cosas. Pero como directiva no nos corresponde intervenir".