El timonel calificó de "complicado e irresponsable" soñar con un recinto en medio de una crisis financiera mundial.
La junta de ordinaria de accionistas de Azul Azul, que se realizó este jueves en el Arena Santiago, se desarrolló de manera normal, aunque el presidente de Universidad de Chile, Federico Valdés, descartó por ahora la construcción de un estadio propio ante la insistente petición de los presentes.
La tónica de la reunión entre los principales accionistas del club estudiantil, además de realizar la presentación del balance de la gestión y al nuevo director Cristóbal Yuraszeck, fue el tema de un estadio propio que les permita jugar de local y no transitar por los distintos estadios del país-
Sin embargo, el timonel estudiantil fue cauto y prefirió descartar la opción de ese viejo anhelo ante el difícil escenario económico, ya que de hacerlo bajo estas condiciones el club podría volver a la quiebra.
"Con un presupuesto de nueve millones de dólares al año es tremendamente complicado, por no decir irresponsable, hacer un proyecto de 40 o 50 millones. Ese es un proyecto que, tal como están las cosas hoy día, podría llevarnos a la quiebra y por lo tanto no nos vamos a meter en proyecto de estadio, mientras las condiciones no estén dadas", dijo.
Respecto a las mencionadas condiciones se explayó el mandamás universitario, especialmente al incremento de las recaudaciones.
"Mientras los ingresos de la U no hayan subido significativamente, mientras no tengamos los ingresos muy superiores a los que tenemos hasta ahora en recaudación de borderó, auspicios, venta de jugadores, venta de camisetas, etcétera, no estamos en una etapa de desarrollo de la U en que se pueda financiar la construcción de un estadio", aseguró.
Tras cartón se espera que en la junta de directorio de Azul Azul de la próxima semana se haga la ratificación de Federico Valdés como presidente por el período de tres años.