Se estima un gasto de US$ 30 millones y parte de los ingresos por la próxima salida a la Bolsa se destinarán a una consultora que analice la viabilidad de su construcción.
Es, quizás, el sueño más ferviente de los hinchas de Universidad de Chile. Motivo de varias discusiones, incluso dentro de la actual administración del club. Por eso, la simple idea de que Azul Azul por primera vez se tome en serio la posibilidad de construir un estadio propio sorprende. Más todavía, cuando hace algunos meses esta opción era prácticamente desechada por ser "inviable".
El directorio de la concesionaria finalmente se abrió a la opción real de tener un recinto. Ya se le encargó a una oficina de arquitectos el diseño del estadio y se determinó tener antes de fin de año un profundo estudio de mercado sobre los costos y ganancias que involucra un proyecto de esta magnitud.
"Es el primer paso concreto que damos en Azul Azul en este tema. Queremos saber cuánto vale, todas las formas de financiamiento y los posibles lugares en que se podría levantar nuestra cancha", reconoce el presidente de la "U", Federico Valdés.
Aunque las autoridades del cuadro estudiantil prefieren hablar de un "anteproyecto", lo cierto es que ya están definidos ciertos márgenes de acción. Por ejemplo, la maqueta debe ser de un estadio para 30 mil personas.
"Tendríamos el segundo recinto más grande de un club, después de Colo Colo. El de ellos es para 50 mil, pero lo llenan dos o tres veces al año… entonces no vale la pena pensar en uno así de grande", recalca Valdés.
Y al momento de estimar los costos, el cálculo apunta a una inversión de mil dólares por asiento. Es decir, un complejo de US$ 30 millones, más la compra del terreno.
¿Cómo financiarlo?
Las cifras reales, sin embargo, recién se conocerán luego del trabajo que realizará una consultora externa. Azul Azul espera ingresos por cerca de US$ 22 millones luego de su próxima salida a la Bolsa, en agosto u octubre. Una parte de esa suma se gastará en el complejo de entrenamiento del club y otra tajada se destinará al estudio sobre un potencial coliseo.
Si bien la prioridad es el centro de práctica (US$ 6 millones), también se quieren ver formas de financiamiento del estadio. "Hay varias ideas. La que más nos interesa es la venta anticipada de palcos y asientos. Queremos que la empresa externa nos diga si es necesario vender 100 palcos o 1000 asientos de Andes, por ejemplo", indica el timonel de la "U".
Otra alternativa es conseguir un auspiciador que se haga cargo de la construcción, como se estila en Estados Unidos. "El sistema se llama title sponsor (auspiciador principal). Es por eso que debemos hacer un estudio de mercado antes de lanzarnos con un proyecto así", explica Valdés.
¿Dónde? Peñalolén, Quilicura, Independencia, Maipú son algunas de las comunas en carpeta. Pero falta para llegar a esa parte del sueño azul.
Fuente: La tercera